Hoy me despido. Hoy domingo entendí que el ciclo de Leerlerus había acabado. Siete meses se han sucedido como los más voraces aditamentos tras la excéntrica voz que viene de allá; de ese lugar que apuntamos con el dedo y nos queda grabado en la memoria por un gran lapso de tiempo. Pero que no hay palabras para ubicar de donde surge, de donde da forma y por que lugar transita. Eso fuí, una concatenación de muchas cosas... de noches frente al vidrio y de terrazas reveladoras. Este que enseño a continuación es el punto que destuye todo futuro, donde su presente finalmente es consecuencia del pasado y donde supe cuando dejar de correr para sentarme a disfrutar de los elìxires. Este punto final concluye con las gracias por participar a todos. Gracias.
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domingo, 23 de marzo de 2008
Despedida
Publicado por
Mausoleo de Cristal
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